La Aguja del Fus está situada en el corazón del Parrisal, auténtico emblema natural de los Puertos de Beceite. Se trata de una esbelta y bella aguja que sobresale entre les Gúbies del Parrisal, cientos de agujas de todo tipo que bordean el río Matarraña antes de llegar a los Estrechos.
Aunque la escalada en sí no supone un reto de gran envergadura, apenas 50 m; la aproximación, el descenso y el marco incomparable en el que se desarrolla esta actividad son un gran aliciente para pasar una buena y larga jornada.
J.M. Anglada, E. Muñoz, Kildo Carreté y D. Llin realizaron su primera ascensión en 1967.
Material aconsejable: fisureros, 2 v y 2 universales. Con un buen juego de Alien te puedes ahorrar el clavar algún clavo.
Llegar a su base tiene su miga, 2 jornadas nos costó llegar a pie de vía con tiempo.
Una primera intentona con Mija nos llevó pasar toda la tarde entre canales muy cerca de la base pero que no te permitían llegar a la misma, al final del día conseguimos encontrar los rápeles y dejamos la faena para otra jornada . La única info que teníamos era un especial del Port de la revista Vértex. La reseña inconfundible de Armand cuesta contrastarla con la realidad entre el bosque y el sinfín de canales existentes.
Una vez te conoces la aproximación todo cambia, aún así hay que contar con media jornada larga.
Aproximación: Desde el Parking del Parrizal seguimos el sendero que remonta el río ( 45´- 1h), desde aquí divisaremos ya la aguja a nuestra izquierda. Es Justo antes de llegar a los estrechos y dónde hay una bifurcación en el sendero, ascendemos por el bosque de pinos unos 50 metros.
Pusimos algún mojón y podamos alguna sabina que marcan el inicio de una trepada (III) o IV- que hicimos encordados colocando algún seguro intermedio. Este largo nos deja en una canal boscosa que ascendemos en diagonal a izquierda durante unos 15 minutos. Llegaremos al bosque y siguiendo el torrente remontamos por él durante 15 minutos más. Al llegar al caos de piedras giramos a derechas y subimos por la loma hasta las Aristas.
El problema aquí es que todas las aristas se ven pararelas e iguales.
De las dos más a la derecha destrepamos por la 2ª unos 200 metros hasta encontrar el primer rápel (puente de roca, 50 m). Rápel en diagonal a derechas un tanto extraño que al final mola guiarlo hasta el pino o destrepe-rápel un poco hasta el mismo
El segundo rápel se hace desde un pino pequeño hasta pie de chimenea y base de la Aguja.
Aquí empieza la escalada por una corta chimenea (IVº) que nos lleva a R1.
El segundo largo es más laborioso en sus primeros metros y escalamos en libre (V+, V)desde el filo de la aguja hasta la cima con una perspectiva inigualable del Parrizal.
Tras comentarlo con uno de sus aperturistas, K. Carreté, reforzamos la R1 y R2 con un parabolt
sustituyendo 2 buriles precarios.
Descenso: Un rápel desde la cima nos lleva a pie de vía. Descendemos por la canal de la izquierda hasta una sabina dónde realizamos otro corto rápel hasta el bosque. Seguimos descendiendo hasta un resalte que rapelaremos con un rápel de 30 m desde una gran encina. En 5 minutos más por el bosque llegamos a la senda del Parrizal que en 45´nos lleva al parking.
Cordada: Santi, Mija y Nitrick.
Vía recomendable para coleccionistas de agujas y Romantic Climbers.